La modelo Lindsey Wixson, de 17 años, tuvo un caminar desafortunado sobre la pasarela en el desfile en que Naomi Campbell había organizado para recaudar fondos para las víctimas del tsumani de Japón en el Festival de Cannes.
Wixson, con un bello vestido de gala en tono dorado y grandes volúmenes, se cayó no una sino cuatro veces sobre la pasarela. Al parecer, el problema no eran esta vez los tacones sino la largura de la falda, que se le enredó varias veces entre los pies, para sorpresa del público y de la propia modelo.
Pero este no fue el único incidente del show, otras dos modelos más se cayeron la primera, subida en unos altísimos tacos, reaccionó tapándose la cara, entre sonriente y sonrojada, y la segunda, siguió con su camino como si nada hubiera pasado.
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